Esta técnica no es apta para todos los estómagos, hay que tener las ideas muy claras antes de utilizarla. Es una técnica ideal para instantáneas donde quieres acción sin tregua, o para darle vidilla a tu partida de siempre.
La técnica consiste en elegir en secreto un personaje, aquí puede entrar el azar, la mala baba, el que primero llegue, el que siempre llega tarde, el que menos se mueva, etc, la elección está en tus manos. Pues una vez elegida la victima, se le castiga con un doloroso tiro en las tripas, algo terriblemente doloroso y mortal, pero a medio plazo, lo que obligará al jugador a actuar a mayor velocidad, ya que contará con una sangrienta cuenta atrás de la que no se sabe el momento del fin. Todo aderezado con descripciones truculentas y con énfasis en el dolor, a veces paralizante, que sufre el pobre insensato. También debes jugar con el entorno, no es lo mismo un tiro en la esquina de la calle del hospital o en la oficina del FBI que en un sucio almacén en un polígono abandonado en las afueras de la ciudad, o en un apartado cerro nevado. Aunque el sistema de juego no lo contemple, debes usar la sangre como arma, sangrar es una de las experiencias que marcan una vida, sentir como se te escapa el líquido vital te hace valorar mucho más tu vida.
Además servirá para estrechar los lazos entre los jugadores.
Dales esperanza, a un pj que sobrevive a esto se le coge cariño, aún recuerdo un pato de Runequest que regeneró una pata a lo largo de tres meses, defendiendo el resto de su cuerpo a capa y espada.
“Ayudame, tío” “joder, no es para tanto, todavía te quedan x puntos de vida” MAL, evita esto por encima de todo, la calculadora con los puntos de vida y el daño de las armas es el antirol. Lo importante es que la gente sienta ese dolor, esa angustia, evita el “me hago otra ficha” (Como odio esta frase)
Puedes sustituir el disparo por un veneno, lento, doloroso y leal, si no encuentran el antídoto a tiempo, adiós muy buenas. En una ambientación moderna o futurista , la radiación también les hará correr. En algo fantástico, una maldición, petrificación o algo así hará el mismo papel.
Hay una reacción a esto que no se como tomarla, se trata del sacrificio, el clásico “ Corra usted, Sargento, sálvese, yo los mantendré a raya”. Queda peliculero, y como tal , recomendable, pero tiene un tufillo a “mi pj está muerto, me da igual lo que me pase”.
Esta técnica les recuerda que pueden morir, que el mundo es un lugar peligroso, que nadie es invencible, que las armas son malas, y que el 95% de los PJs mueren en combate, no formes parte de las estadísticas.
No repitas esta técnica a menudo, ni con el mismo jugador, porque puedes provocar dos reacciones que no deseas , la primera, el miedo paralizante, tus jugadores pueden empezar a asustarse de todo, a asegurarse de todo antes de hacer algo, y eso no es bueno. O por el contrario, aceptan la mortalidad de sus personajes como algo natural y se lanzan al peligro como suicidas, esto tampoco te conviene. Busca el equilibrio, como siempre, a no ser que pretendas una partida así, como el Escuadrón Suicida o Strikeforce Morituri, o un rollo película de miedo adolescente con los personajes corriendo y gritando toda la partida.
Espero que disparéis a vuestros jugadores (figuradamente solo, a pesar de todo), que los lisiéis y los mutiléis, le cogerán cariño a sus personajes tullidos, siempre os sorprenderán, queridos desconocidos.
Y como regalo, las diez mejores peliculas de tiroteos (Shoot`em Up) del cine, todos los Masters que quieran llevar un tiroteo a sus partidas, deberían ver esto primero.